A pesar de las adversidades, el adulto mayor se niega a abandonar su hogar. "Si te vas, lo poquito que tienes te lo roban, así que tengo que quedarme".
Monclova, Coah.- Roberto Ramírez Oviedo, de 74 años, enfrenta las bajas temperaturas en una vivienda improvisada de madera, sin servicios básicos como agua y electricidad en el ejido Curva de Juan Sánchez.
El ex trabajador de Altos Hornos de México, donde laboró desde los 18 años, subsiste actualmente con el apoyo de programas sociales del gobierno federal.
"No nos apoyan las autoridades. La pipa pasa pero solo deja agua a dos o tres personas", relató Ramírez Oviedo, quien vive solo en una casa que construyó por sus propios medios.
Durante las noches más frías, debe levantarse cada dos o tres horas para vigilar que no le roben la madera que utiliza para calentarse.
A pesar de las adversidades, el adulto mayor se niega a abandonar su hogar. "Si te vas, lo poquito que tienes te lo roban, así que tengo que quedarme".
Para protegerse del frío, mantiene una fogata encendida en el exterior y utiliza cobijas para aislar su habitación.
En el asentamiento donde vive Ramírez Oviedo habitan apenas cuatro familias, todas en condiciones similares de precariedad.
Aunque su hija lo visitó en diciembre para celebrar las fiestas preparando tamales y otros platillos, no tiene la opción de vivir con ellos. "¿Vivir? No, nadie se me acerca", comentó con resignación.