Algunas personas en redes calificaron el video como indignación, ya que ni las mascotas están a salvo en una propiedad privada y que sean hurtados o ser blanco de otros actos de crueldad por externos.
La mujer puso al cachorro en venta por medio de un perfil en Facebook.
Tampico- Un hecho se registró en la localidad de Tampico, Tamaulipas, luego que se difundiera un video del robo de un perro en una casa.
De acuerdo a El Heraldo México, fue un cachorro de raza husky que fue hurtado por una mujer desde el interior de un domicilio en la colonia El Vergel.
Aunque ocurrió el pasado 9 de diciembre, sigue cobrando relevancia en las redes sociales. La cámara de seguridad captó que la mujer tomó al cachorro y cerca de él, estaba otro husky adulto, que se presume era su madre o padre o de la misma familia.
La mujer, acaricia a los perros y luego de ganar su confianza, sustrae al cachorro más pequeño aprovechando la baja altura de la reja.
Pocos días después del robo, la mujer puso al cachorro en venta por medio de un perfil en Facebook, fijando un precio de tan solo 200 pesos.
😡 En #Tampico, una mujer robó a “Comino”, un perrito #Husky, directamente de su casa en la colonia Vergel.
— Janeth León M (@janethleontv) January 4, 2025
La mujer vendió al perrito por 200 pesos, pero gracias a la difusión en redes, el comprador lo devolvió al notar que había sido robado. 🙌 pic.twitter.com/oLxGOrLa8Z
Los dueños legítimos del perrito comenzaron a compartir publicaciones en redes sociales denunciando el robo y pidiendo ayuda para localizarlo.
El giro inesperado en esta historia llegó cuando la persona que compró al cachorro se percató de que se trataba del mismo animalito reportado como robado.
Sensibilizado por el caso, el comprador decidió devolver al perrito a sus dueños legítimos, quienes expresaron su gratitud a través de redes sociales.
Los dueños del cachorro hicieron un llamado a cuidar mejor a las mascotas y a denunciar cualquier acto sospechoso que ponga en peligro su bienestar.
Algunas personas en redes calificaron el video como indignación, ya que ni las mascotas están a salvo en una propiedad privada y que sean hurtados o ser blanco de otros actos de crueldad por externos.