“Es el dinero lo que les importa a los dueños de las minas, no la vida humana”, sentenció el obispo emérito de la Diócesis de Saltillo, Raúl Vera
Monclova, Coah.- “Es el dinero lo que les importa a los dueños de las minas, no la vida humana”, sentenció el obispo emérito de la Diócesis de Saltillo, Raúl Vera López, al referirse a la tragedia de la mina Pasta de Conchos, tema sobre el que también afirmó que se ha convertido “en un juego”, para las diferentes administraciones federales.
Este domingo, Vera estuvo en Monclova, para oficiar una misa al mediodía en la parroquia de Nuestra Señora del Refugio, en el Sector Oriente de la ciudad.
Al concluir la ceremonia, el clérigo accedió a ser abordado por los medios de comunicación, y fue inquirido sobre la situación de Pasta de Conchos.
Lo anterior, a raíz de que durante su administración, el ex presidente Andrés Manuel López Obrador, prometió rescatar los cuerpos de los mineros fallecidos en 2006 y no lo cumplió; y hacia el final de su gestión, le asignó esta responsabilidad a la actual presidenta, Claudia Sheinbaum (quien el pasado viernes se comprometió a hacer lo propio, durante su visita a la Región Carbonífera).
" “Es como un juego, lo toman como un juego”, refirió Vera López, quien sostuvo que Pasta de Conchos es la única desgracia minera, en un lapso de 100 años, en la que no se rescataron a las víctimas.
" “¿Pues qué esperábamos? Si no lo hicieron en el momento (…) es que ya no les importaba. Y aunque sean los que nos están gobernando en este momento, pues cada día les interesa menos”, lamentó.
" “Debían haber hecho el rescate inmediatamente, eso es lo que no se perdona, que no lo hayan hecho los gobiernos (…) Incluso, es muy probable que haya habido todavía personas vivas”, sostuvo.