Lucas Martínez Sánchez, dejó un gran legado en Coahuila, pues fue reconocido como la memoria colectiva del Estado.
Castaños, Coah.- El historiador Lucas Martínez Sánchez, quien falleció debido al cáncer de estómago que padecía, dejó un gran legado en Coahuila, pues fue reconocido como la memoria colectiva del Estado, ya que realizó grandes investigaciones, además de que escribió varios libros.
Sóstenes de Hoyos Martínez, presidente del Colegio de Investigaciones Históricas del Centro de Coahuila, dio a conocer que Lucas Martínez nació en 1968 en Múzquiz, pero la mayor parte de su vida fue hijo adoptivo de Monclova, donde realizó sus primeros estudios e inició con la ardua tarea de la investigación histórica.
Comentó que durante más de 30 años de trayectoria, Lucas Martínez Sánchez, encabezó proyectos trascendentales como la modernización del Archivo General del Estado, la inauguración de la nueva sede del Centro Histórico de Saltillo, cuyo espacio multiplicó la capacidad de resguardo y garantizó las condiciones óptimas para la conservación de documentos históricos, que van desde registros coloniales hasta archivos contemporáneos.
Mencionó que fue un prolífico escritor y un apasionado investigador de la historia, autor de 20 libros y decenas de artículos; se especializó en temas relacionados con la entidad, la cultura y los acontecimientos históricos del Estado de Coahuila.
Comentó que entre sus obras más notables destacan los análisis históricos sobre la independencia de México, la Revolución Mexicana, además del rescate de diferentes personajes que ayudaron a nutrir las páginas, no sólo de Coahuila, sino de todo México.
Destacó que su primer libro fue “Historias y Leyendas de Monclova”, editado en 1997 en Monclova, por el cual tuvo varios reconocimientos durante las últimas tres décadas; durante su carrera, recibió múltiples reconocimientos, incluyendo un homenaje por su más de tres décadas al servicio de la historia y los archivos, conservando la memoria histórica en marzo del 2024.
“Entre los homenajes recibidos está el que le dio el Instituto Coahuilense de Cultura, quien le otorgó el distintivo por su invaluable contribución al patrimonio documental del Estado de Coahuila de Zaragoza”, señaló.
El entrevistado, dijo que el prolífico historiador fue miembro de número del Colegio de Investigaciones Históricas del Centro de Coahuila y de la Asociación de Cronistas e Historiadores de Coahuila, donde fue presidente.
Resaltó que su trabajo contribuyó significativamente a fortalecer la identidad cultural de Coahuila, y mantener viva su memoria histórica,
“Cómo olvidar nosotros nuestras andanzas por los montes de nuestra región de nuestras vidas, a la loma del emprendimiento de nuestra visita a la tumba del coronel Ildefonso Fuentes, de sus andanzas por Palo Blanco y Castaños, quien quiso mucho”, recordó.
Finalmente, dijo que con su fallecimiento, Coahuila pierde a un gran historiador que dedicó su vida a rescatar las memorias del Estado.