Frente a esta situación, es crucial que padres y docentes se involucren activamente, brindando orientación y proponiendo alternativas positivas que mantengan a los menores alejados de estos desafíos perjudiciales.
En la era digital, los desafíos virales se han convertido en una tendencia masiva que atrae principalmente a niños y adolescentes. Estos retos, creados tanto por empresas como por usuarios de plataformas como TikTok, Instagram y Snapchat, buscan generar popularidad, reconocimiento y una mayor interacción social.
Mientras algunos de estos desafíos fomentan la creatividad, el arte y el bienestar físico, como el popular “Draw This In Your Style Challenge”, otros pueden representar un peligro real para la salud y la seguridad de quienes participan.
Existen retos extremos que, impulsados por la presión social y el deseo de aceptación, llevan a los menores a realizar acciones riesgosas. Ejemplos de esto son el “Blackout Challenge”, donde los participantes intentan contener la respiración el mayor tiempo posible, o prácticas aún más peligrosas como prenderse fuego tras rociarse el cuerpo con alcohol.
Frente a esta situación, es crucial que padres y docentes se involucren activamente, brindando orientación y proponiendo alternativas positivas que mantengan a los menores alejados de estos desafíos perjudiciales.