Si bien el intento de grabación fracasó, el video fruto de la situación resultó divertido y todo un éxito viral.
Una joven en un gimnasio quería registrar con el teléfono su rutina de ejercicios, pero no salió como tenía previsto. La chica puso el móvil en el suelo cerca de una máquina, al parecer, de extensión de espalda. Por desgracia, un hombre comenzó a usar ese aparato en medio de la grabación y cada vez que se inclinaba, su cabeza se interponía entre la cámara y su dueña. Si bien el intento de grabación fracasó, el video fruto de la situación resultó divertido y todo un éxito viral.
Bro did not even care her camera was there 😭 pic.twitter.com/J1MoBOZWFQ
— FearBuck (@FearedBuck) March 27, 2025