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Migran coahuilenses a Nuevo León y regios las adoptan; se acomodan en calles, plazas, puentes, Metro…

Daniela y Marisela, originarias de Piedras Negras, decidieron emprender la aventura de vivir en Monterrey buscando una mejor calidad de vida.

Zócalo Saltillo las entrevistó el 25 de noviembre del 2022. Vivían debajo de ese puente, pero parece que ya prosperaron y hasta se mudaron a la Plaza de las Naciones
Rosalío González
ZOCALO | MONCLOVA
12-23-2024
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Ramos Arizpe, Coah.- En 2022, un par de mujeres llegó de Piedras Negras, Coahuila, y acondicionó un espacio bajo el puente de Morones Prieto y Pío X para “instalarse”.

La “aventura” de Daniela y Marisela cumplió dos años, en los que han sorteado los peligros de las calles regiomontanas, una ciudad a donde llegaron a vivir procedentes de Piedras Negras con el objetivo de tener una mejor vida, que no han podido realizar.

Zócalo Saltillo las entrevistó el 25 de noviembre del 2022. Vivían debajo de ese puente, pero parece que ya prosperaron y hasta se mudaron a la Plaza de las Naciones… pero no sólo se mudaron de vivienda, también se cambiaron de nombre, ahora son Sandra y Carmen, según reportó Agencia Reforma, quien platicó de nuevo con ellas esta semana.

Hace ya dos años que Daniela y Marisela, originarias de Piedras Negras, decidieron emprender la aventura de vivir en Monterrey buscando una mejor calidad de vida.

Hoy en día, siguen viviendo en la calle y hasta cambiaron de nombre; ahora Sandra y Carmen tienen como residencia la Plaza de las Naciones.

Ahí lavan, se asean y almacenan bolsas de ropa que les han regalado, incluso siguen bañándose en la calle, igual que hace dos años, que se “duchaban” en el río Santa Catarina, ante el asombro de quienes transitaban por el aglomerado cruce.

Daniela y Marisela se decían amigas, hoy, Sandra y Carmen se dicen hermanas. Se siguen quejando de la falta de trabajo: “es escaso y la paga es poca”.

Eso sí, ambas siguen dedicándose al trabajo de limpieza en casas, una de las pocas características que conservan de la historia que narran en la actualidad de su pasado.

En aquella ocasión contaron que habían viajado en tren desde Piedras Negras, ciudad en la que nacieron. Se conocieron en la colonia El Salvador hace 16 años y tenían el sueño de vivir en Monterrey, porque habían visto esa ciudad en la televisión y porque quienes habían vivido allá les dijeron que los regios ganaban bien. “Quisimos venir pa’cá, para ver caras nuevas, caras bonitas”, expresó Sandra.

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