El presidente Joe Biden emitió la orden a seis días de abandonar la Casa Blanca.
Washington.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, retiró este martes a Cuba de la lista de países que promueven el terrorismo, a menos de una semana de ser relevado por Donald Trump, quien en su primer mandato incluyó a la isla en ese listado que conlleva severas sanciones.
Biden tomó esta decisión para propiciar la liberación próximamente de varios presos cubanos como parte de un proceso que cuenta con la mediación del Vaticano, informaron a la prensa altos cargos de la Administración estadunidense.
“Se ha completado una evaluación, y no tenemos información que respalde la designación de Cuba como patrocinador estatal del terrorismo“, explicó un funcionario que pidió el anonimato. Es “un gesto de buena voluntad con el fin de facilitar la liberación de las personas injustamente detenidas“, añadió.
La decisión del demócrata Biden podría quedar anulada en pocos días, cuando el republicano Donald Trump tome posesión como presidente de Estados Unidos y Marco Rubio pase a ser secretario de Estado.
Rubio, cuya familia salió de Cuba en los años 50 antes de la revolución comunista que llevó al poder a Fidel Castro, ha sido siempre un proponente de sanciones contra la isla.
Rubio asistirá el miércoles a la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado para sus audiencias de confirmación y probablemente en sus declaraciones hablará de sus raíces cubanas.
En los últimos días de la primera administración de Trump, el 11 de enero de 2021, la Casa Blanca restableció la designación, que había sido revertida durante el período de acercamiento entre Cuba y Estados Unidos durante el segundo mandato del presidente Barack Obama.
Al hacerlo, la administración Trump citó el apoyo de Cuba al líder venezolano Nicolás Maduro y su negativa a extraditar a rebeldes colombianos a Colombia, entre otros temas, incluyendo su continuo albergue de estadounidenses buscados. La decisión fue una de varias en el área de política exterior que Trump hizo en los últimos días de su primer mandato.
Grupos de derechos humanos y activistas, incluyendo la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, han estado presionando a la administración de Biden para que levante la designación.
Información de Milenio.