"Las icónicas zapatillas de rubí usadas por Judy Garland en El Mago de Oz serán subastadas tras su robo hace casi 20 años.
La emblemática película de 1939, El Mago de Oz, vuelve a captar la atención del público. La razón es que la casa de subastas Heritage Auctions, ubicada en Dallas, Texas, ha anunciado la subasta el próximo 7 de diciembre de uno de los pares de zapatillas de rubí utilizadas por Judy Garland en su papel de Dorothy.
Este par de zapatillas en particular proviene de la colección de Michael Shaw, un reconocido coleccionista de memorabilia, quien lo prestó al Museo Judy Garland en Grand Rapids, Minnesota, para una exhibición en 2005.
Estas icónicas zapatillas, adornadas con lentejuelas y cuentas brillantes, forman parte de los pocos pares originales que sobrevivieron a lo largo de los años. Judy Garland, quien falleció en 1969, utilizó varios pares durante el rodaje para distintas escenas.
Sin embargo, de los cuatro pares conocidos, tres se encuentran en la colección privada de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, mientras que el cuarto, que ahora se subasta, ha sido descrito por la revista Forbes como el par de mejor calidad entre los existentes.
Además del par de zapatillas, la subasta incluye otros recuerdos de la película El Mago de Oz, como el sombrero de la Malvada Bruja del Oeste, interpretada por Margaret Hamilton, y la puerta mosquitera de la casa de Dorothy en Kansas.
No obstante, la ciudad de Grand Rapids ha manifestado su deseo de que las zapatillas vuelvan al museo que rinde homenaje a Judy Garland.
Para ello, Grand Rapids ha iniciado una campaña de recaudación de fondos a través del Festival Judy Garland, con el objetivo de recomprar las zapatillas y devolverlas al museo
Este año, los legisladores de Minnesota aprobaron una partida de 100 mil dólares para apoyar el regreso de las zapatillas de rubí a su "hogar legítimo".
En 2005, un hecho inesperado conmocionó al Museo Judy Garland: las zapatillas de rubí fueron robadas de una de sus vitrinas.
El responsable fue Terry Jon Martin, quien, según sus propias declaraciones, cometió el robo como parte de su "último golpe", motivado por el rumor de que las zapatillas, valoradas en un millón de dólares, estaban incrustadas con joyas reales.
Durante el hurto, Martin usó un martillo para romper tanto el vidrio de la puerta como el de la vitrina que protegía el calzado.
Luego de 13 años, en 2018, el FBI logró recuperar las zapatillas en una operación encubierta realizada en Minneapolis. Aunque en octubre de 2023 Martin se declaró culpable de robar este valioso artefacto, su delicado estado de salud le permitió evitar la cárcel.
En lugar de una sentencia de prisión, se le impuso un año de libertad condicional y una multa de 23 mil 500 dólares como indemnización al museo por los daños causados.
Janie Heitz, directora del Museo Judy Garland, mencionó en una entrevista con CBS News el impacto que el robo tuvo en la reputación del museo.
“Se ha convertido en algo infame para nosotros. Siempre seremos conocidos como el lugar donde se robaron las zapatillas de rubí, lo que tiene muchas consecuencias negativas, pero también puede tener algunas positivas, porque nos puso en el mapa”.
A pesar del incidente, el interés por las zapatillas ha aumentado, y hoy su valor de mercado se estima en 3.5 millones de dólares.