Fortalecimiento del tejido social es vital para erradicar la violencia y fomentar un entorno más seguro y solidario.
Cuatro Ciénegas y Monclova.- Este lunes, la Diócesis de Saltillo organizó un evento para la firma del convenio del Diálogo Nacional por la Paz, que reunió a los 13 alcaldes de la Región Centro, así como al secretario de Gobierno, Óscar Pimentel González y el propio obispo Hilario González; este encuentro se llevó a cabo en un contexto donde la Iglesia Católica ha estado promoviendo campañas para fortalecer el tejido social y abordar problemáticas de seguridad y justicia en la comunidad.
El obispo Hilario González, destacó la importancia de trabajar en conjunto con diferentes organismos sociales para construir una agenda por la paz, que incluye temas fundamentales como la unidad familiar, las adicciones, la salud mental y el desarrollo personal.
“El tejido social se ve afectado no sólo a nivel comunitario, sino también en el núcleo familiar; es crucial que trabajemos juntos para sanar y fortalecer estos vínculos”, afirmó el religioso.
Desde septiembre del año pasado se han llevado a cabo conversatorios por la paz que han permitido identificar temas nucleares que requieren atención urgente, lo que generó la creación de una agenda nacional por la paz, ha sido un paso significativo que busca involucrar a los gobiernos estatales y municipales en planes de acción concretos.
El evento también se centró en el compromiso del Gobierno Estatal, bajo la dirección del gobernador Manolo Jiménez, de colaborar estrechamente con la Iglesia y otras organizaciones para implementar políticas públicas que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos.
“Coahuila es el Estado más seguro de México, pero aún enfrentamos retos importantes como la violencia familiar y hacia las mujeres y niños. Este tipo de reuniones son esenciales para abordar estos problemas”, mencionó Óscar Pimentel González.
Los participantes coincidieron en que el fortalecimiento del tejido social es vital para erradicar la violencia y fomentar un entorno más seguro y solidario, por lo que la iniciativa busca no sólo promover la paz, sino también reconstruir las bases familiares y comunitarias que sostienen a cada individuo.
Con este evento, tanto líderes religiosos como políticos reafirmaron su compromiso con la paz y el bienestar comunitario, abriendo un espacio para el diálogo constructivo entre todos los sectores de la sociedad, esto mediante la firma del convenio y en un acto representativo todos encendieron el fuego de la esperanza.