Radio en vivo

mon_divider

Mauricio Fernández, un político marcado por su pasión por el arte y el coleccionismo

Desde muy joven coleccionó objetos diversos: fósiles, minerales, arte popular, monedas, libros y cartografía

Desde muy joven coleccionó objetos diversos: fósiles, minerales, arte popular, monedas, libros y cartografía
La faceta de Mauricio Fernández como coleccionista y promotor cultural se cristalizó en el Museo La Milarca, inaugurado en julio de 2024. Foto: El Norte | Info7
Agencia Reforma
ZOCALO | MONCLOVA
09-23-2025
Regresar

Ciudad de México.- Antes que su faceta como político, Mauricio Fernández desarrolló su interés en el arte y el coleccionismo, actividades que marcaron su trayectoria.

El político de 75 años fallecido anoche fue un gran coleccionista de arte y amigo de reconocidos artistas, como Francisco Toledo.

Desde muy joven coleccionó objetos diversos: fósiles, minerales, arte popular, monedas, libros y cartografía, vocación cultivada desde su infancia y alimentada por su madre, Doña Márgara Garza Sada, también de reconocida trayectoria como mecenas y promotora cultural.

Como promotor cultural participó como consejero del Ballet de Monterrey, del Museo de Historia Mexicana y del Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León.

Fue presidente del patronato del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca, del taller Artesanarte, del Museo del Ojo y benefactor del Museo Franz Mayer, además de impulsar esculturas urbanas en Monterrey como “La Lagartera”, de Francisco Toledo, a un costado del Museo de Historia Mexicana.

Su faceta como coleccionista y promotor cultural se cristalizó en el Museo La Milarca, inaugurado en julio de 2024 en el Parque Rufino Tamayo, réplica de lo que durante décadas fue su casa en Chipinque.

En el recinto de Valle Oriente se exhibe de todo: arte, libros, monedas, estampillas, armas, documentos y fósiles.

Con más de tres mil 500 piezas de arte, La Milarca alberga fósiles como el pez jurásico Lepidotus, un fémur de brontosaurio, restos de Triceratops, un cráneo de Tyrannosaurus, el plesiosauroide “Mauriciosaurus fernandezi”, bautizado en su honor.

También exhibe objetos como espadas de Hernán Cortés, Iturbide, Allende y Porfirio Díaz, medallas, joyería, retratos originales de Diego Rivera, Frida Kahlo niña y Rufino Tamayo, así como estructuras históricas y piezas de arte popular.

El Gabinete de Mauricio, la última sala, reúne las piezas de mayor valor de su colección.

No sin polémicas, Fernández ofreció este acervo en comodato al Estado con el deseo de que fuera un legado cultural.

La réplica de su casa incluye los techos mudéjararcos góticosportales virreinales y materiales tradicionales, todo integrado dentro del museo como un espacio abierto al público.

En su actual administración como Alcalde de San Pedro convirtió el museo El Centenario en el Museo de Antiguos Mexicanos, con piezas prehispánicas de Grupo Alfa.

Videos en Tiktok