Una mamá es capaz de subir montañas por el bienestar de sus hijos y esto fue lo que hizo Rocío Yazmín Rodríguez Marrero.
Monclova, Coah.- Una mamá es capaz de subir montañas por el bienestar de sus hijos y esto fue lo que hizo Rocío Yazmín Rodríguez Marrero, quien desde hace tres años se ha dedicado a subir montañas y participar en diferentes maratones para llevar a todo el mundo un mensaje de amor hacia las personas que tienen el trastorno del espectro autista.
Comentó que empezó a correr maratones y subir montañas hace tres años, luego de que se dio cuenta de lo importante que es el que las personas conocieran más sobre el trastorno del espectro autista y que entiendan que esto no es una enfermedad, sino una condición con la que se nace.
Destacó que su pequeño Diego Eduardo, quien tiene 12 años de edad, nació con esta condición y en un inicio fue difícil para ella y su marido, pues no conocían mucho sobre la misma, pero poco a poco se fueron informando y además ayudaron a su pequeño para que pueda salir adelante.
“Mi hijo tiene una condición que está dentro del espectro del autismo, no tiene lenguaje a sus 12 años, sin embargo, a través de estos años hemos hecho una labor con él y hoy él es completamente independiente, seguimos trabajando con él”, señaló.
Ante esto, dijo que ahora que él es completamente independiente, decidió comenzar a entrenar y llevar un mensaje de amor e inclusión de las personas que tienen esta condición, por lo que se comenzó a preparar para los maratones y subir montañas, por lo que inició subiendo el Cerro de la Gloria, luego algunas montañas en Arteaga y hace dos semanas subió el Iztaccihuatl, además de que corrió un medio maratón en Los Cabos.
“Para mí subir las montañas representa las altas y bajas que pasamos durante sus primeros 6 años de vida de mi hijo porque sus emociones eran muy inesperadas, era una montaña rusa y esto se los hago saber a todos con los que logró llegar a la cima”, señaló.
Mencionó que su entrenador de montaña es Edmundo Torres y un grupo de Saltillo que se llama EdAdventure, que son quienes la han acompañado a ella y ahora a su esposo Ramón Pérez, quien hace poco comenzó a subir también con ella.
“Yo lo hago por mi hijo, para llevar a todos este mensaje de amor e inclusión de las personas que tienen el trastorno del espectro autista, pocos conocen sobre esto y sobre el gran cariño que ellos saben dar”, finalizó.