Pide a Jueza que recapacite sobre decisión de dejar libre al responsable de la muerte de su esposo
Frontera, Coah.- Al causar el accidente en el que pereció Marco García Moreno, Pablo Morales cortó de tajo las ilusiones de una familia entera.
Recuperándose, maltrecha, aún con el cerebro inflamado, Litzy Yamilé Alonso Jiménez recuerda a su pareja como un hombre responsable, trabajador, que les daba todo ‘a manos llenas’ a ella y a la hija de ambos, Reina, próxima a cumplir 2 años.
En entrevista, mientras yace en una cama en el domicilio de su madre, en la colonia Guadalupe Borja, Yamilé afirma que nada recuerda del accidente en el que murió Marco, ocurrido el sábado, y que fue hasta este lunes que se enteró que él había fallecido.
“Sólo recuerdo que salimos de una refaccionaria en el bulevar Pape. Salimos de ahí y nos fuimos, yo le dije que íbamos hacia la (colonia) Occidental a recoger una falda y de ahí ya no recuerdo nada”, relató Yamilé.
Previamente trascendió que cuando la pareja circulaba en su moto en la colonia Occidental, en la esquina de las calles San Luis y Lázaro Cárdenas, Pablo Antonio Morales les invadió vía, provocando un potente choque en el que falleció Marco y Yamilé resultó gravemente herida.
Y este martes, la jueza Marina Adriana Galindo Ramos determinó que el sujeto permanecerá en libertad, mientras se desahogan las investigaciones del caso, que se realizarán durante un periodo de tres meses.
“Desperté en el hospital… y ya hasta el lunes me dieron la noticia (de que Marco había fallecido)”, acotó Yamilé, quien continúa con una inflamación en el cerebro, y además registra una lesión en el ojo derecho, fracturas en el brazo y mano también derechos; y una herida en la pierna del mismo lado, así como una lesión entre las costillas y la espalda.
“¿Quién se va a hacer cargo de mi hija, si su papá todo le daba a ella?”, cuestionó, preocupada. “A mí y a ella nos daba todo a manos llenas”.
Nostálgica y recordando a Marco como un hombre trabajador y responsable, la joven madre mencionó también que su pareja ya estaba construyendo con sus propias manos la casa de la familia, en el ejido Fresnillo, junto a la vivienda de sus padres.
Sobre la forma en que se conocieron, mencionó que fue a través de la red social Facebook, y poco a poco comenzaron a convivir en persona, hasta sumar tres años de relación, ‘juntados’, dijo.
“Era muy amable, muy cariñoso”, insistió.
Por su parte, Teresita de Jesús Jiménez González, madre de Yamilé, sostuvo que recién acaban de erogar 8 mil 500 pesos para un tratamiento para la inflamación del cerebro de su hija. En este tenor, agregó que Yamilé requerirá este tratamiento cada 15 días, aproximadamente.
“¿Qué le dirías a la Jueza, Yamilé?”, se le preguntó a la joven madre.
“Que recapacite. Que quién va a ver a mi hija el día de mañana”.
“¿Y al responsable del accidente?”.
“Que sea responsable, que ahora está una niña de por medio, a la que tiene qué ver y cuidar… así como su papá lo hacía con ella”, concluyó.
‘Justicia, no fue accidente’
Los inconformes portaron pancartas con múltiples consignas, como “Justicia, no fue accidente”, “Justicia para la familia”, “Justicia para Marcos”, y “Justicia para Litzy”, entre otros mensajes, así como fotografías del joven matrimonio con su pequeña hija.
“Queremos que lo vuelvan a encarcelar, porque él no debe andar suelto, no sé por qué lo soltarían si tenemos muchas pruebas”, dijo molesto el padre de Marco.
“Tenemos el temor de que se vaya de la ciudad, no trae ni brazalete, no trae nada, como si no hubiera hecho nada”, lamentó.
El entrevistado añadió que de acuerdo a versiones de vecinos de la colonia Occidental, Pablo Antonio tiene antecedentes de manejar su camioneta de manera irresponsable, incluso alcoholizado.
En este contexto, acotó que Pablo suele hacer ‘trompitos’ con el vehículo, y que la semana pasada casi se lleva a un niño de encuentro.
“¿Qué es lo que quieren? ¿Qué pasen más accidentes con esta persona suelta?”, reiteró Gerardo, molesto.