Un llamado urgente a la unidad y la resistencia pacífica resuena en los accesos de Altos Hornos de México (AHMSA)
Monclova, Coah.- Un llamado urgente a la unidad y la resistencia pacífica resuena en los accesos de Altos Hornos de México (AHMSA). Rolando Rodríguez Reyna, la voz incansable de los trabajadores que mantienen el plantón en la Puerta 4, emitió una contundente declaración: el futuro de miles de familias pende de un hilo y la férrea vigilancia en la siderúrgica es ahora más crucial que nunca ante el inminente desenlace del Concurso Mercantil. La resolución para el pago de salarios y finiquitos está cerca, y la lucha por la justicia laboral no puede doblegarse.
“No permitiremos que un solo tornillo salga de esta empresa si eso compromete nuestra productividad futura,” sentencia Rodríguez Reyna, cuya presencia diaria en la Puerta 4 es un testimonio vivo de la determinación obrera. Meses de incertidumbre y bolsillos vacíos no han mermado el espíritu de estos hombres y mujeres que, con cada jornada, custodian el patrimonio industrial de Monclova.
Su sacrificio es la única garantía de que los nuevos inversionistas que adquieran la planta encuentren una infraestructura intacta, lista para rugir de nuevo.
La esperanza se entrelaza con la urgencia. Rodríguez Reyna revela que, aunque extraoficialmente, el avalúo del síndico del concurso mercantil ya ha concluido y la subasta pública del gigante acerero está a punto de ser lanzada. La información susurra la existencia de “posibles tiradores” interesados en AHMSA, dispuestos a asumir los pesados pasivos laborales y, lo más importante, a reactivar las operaciones. “Para nosotros, lo esencial no es sólo recibir lo que se nos debe, sino ver los hornos encendidos y la vida volver a esta región”, enfatiza, dibujando el anhelo de una comunidad devastada por la inactividad industrial.
AHMSA se desangra en un proceso de liquidación tras más de un año de silencio. Miles de empleados despedidos, finiquitos impagos, y una región sumida en la desesperación son el paisaje actual. Aunque no hay fechas oficiales, la fe de los trabajadores se aferra a la idea de que la subasta y el cambio de propietario no se extenderán más allá de tres meses.
“Me encantaría que fuera este mismo mes, pero si bien no lo creo posible, descartamos que se brinque al próximo año. El punto crítico ya fue superado; ahora sólo restan los últimos detalles financieros y legales para sellar la venta de la empresa. Ya pasó el tiempo suficiente, deben estar por finiquitar cuánto va a costar la empresa, total es nada más cuestión de dinero”.
El impacto de la paralización de AHMSA es una herida abierta que afecta a más de 17 mil familias en la Región Centro de Coahuila. La voz de Rodríguez Reyna se alza como un estandarte: “Que la gente aguante. La idea primordial de un concurso mercantil es que se rescate la fuente de empleo y que se nos paguen los salarios y finiquitos”.