La iniciativa refiere que las expresiones artísticas que normalizan las conductas violentas y delictivas no deben ser admitidas en un México moderno.
Monclova, Coah.- El Congreso del Estado deberá analizar, con apego a la justicia y a la verdad, la iniciativa ciudadana para prohibir en Coahuila los narcocorridos y las canciones que denigran a la mujer, señaló el obispo Hilario González García.
“Es un tema discutido a nivel nacional con esto de la influencia que pueden tener los narcocorridos en la cultura popular, es algo que ya está muy presente, es algo que tienen que discernir con justicia, con verdad, estos representantes de la ley. Mi opinión es que debemos buscar siempre que el arte nos ayude a elevar el espíritu”.
La iniciativa elaborada por los abogados Juan Manuel González Zapata y Aldo Fabián Rivas Alvizo plantea adiciones al Artículo 337 del Código Penal para tipificar la apología del delito y evitar los mensajes discriminatorios, vejatorios o violentos que atentan contra la tranquilidad y la integridad de las personas.
“Creo que toda expresión del arte debe ser algo que nos ayude a elevar el espíritu, es algo que debe ayudarnos a ser mejores personas. Ojalá que todo eso se tome en cuenta”.
Llama obispo a reformar conciencias
La propuesta establece que quien difunda públicamente imágenes, expresiones, interpretaciones o representaciones que exalten, justifiquen, promuevan, inciten o glorifiquen algún tipo de delito penal, debe ser castigado con cárcel y multa.
Se argumenta que los narcocorridos normalizan el tráfico de drogas, los crímenes y venganzas, y lo presentan como un ejemplo de vida al que se puede aspirar.
“La influencia no significa determinación, yo creo que también hay que formar la conciencia de las personas, hay que formar también nuestro buen gusto de nosotros para poder apreciar lo que sí son verdaderas obras de arte o expresiones musicales o artísticas que nos ayuden a dignificarnos”.
“Acuérdense que siempre, cualquier actividad del hombre, del ser humano, tiene que buscar el bien de la persona, el bien de la humanidad, el bien común”.
La iniciativa refiere que las expresiones artísticas que normalizan las conductas violentas y delictivas no deben ser admitidas en un México moderno, donde las mujeres tienen derecho a una vida libre de violencia y los niños tienen el derecho a crecer en un ambiente de paz.