Monclova, Coah.- A un mes del derrumbe e inundación del pozo carbonero “El Pinabete” donde fallecieron 10 humildes mineros, continúa la impunidad contra los verdaderos propietarios y autoridades al igual que se mantienen vigentes las operaciones de hoyos y cuevas con latente riesgo de más accidentes funestos, manifestó Carlos Garza, vocero de la Sección 147 del Sindicato Democrático.

Pese a la tragedia, todo sigue igual

El vocero de la Sección 147 del Sindicato Democrático señaló que la recuperación de los cuerpos será a largo plazo, hasta un año, según han reconocido las propias autoridades porque no hay condiciones para lograr ese objetivo a corto plazo como se creía inicialmente luego del acontecimiento suscitado el 3 de agosto.

Reiteró que son rudas las faenas laborales en los pozos de carbón sin medidas preventivas trabajando prácticamente con pico y pala sacando el carbón térmico en carretillas con riesgo permanente de inundaciones o explosiones de gas metano, pues se labora en condiciones extremadamente primitivas.

“Después de la tragedia en “El Pinabete” se creía que se aplicarían medidas severas para reducir riesgos de accidente en la Región Carbonífera, pero todo sigue igual, trabajando a pico, pala, azadón y carretillas”, expresó.

Las autoridades, agregó el representante obrero, “saben quiénes son los verdaderos dueños de pozos y cuevas de carbón, y del pozo siniestrado, el Gobierno Federal anunció que indemnizará a las familias afectadas, pero de los dueños quienes se supone deben asumir la responsabilidad no se sabe nada”.