La zona centro de Monclova fue una de las más afectadas, con calles completamente cubiertas de hielo y tráfico interrumpido por momentos.
La tarde del martes, una inesperada granizada cubrió de blanco las calles de Monclova y Frontera, dejando a su paso daños materiales y una fuerte impresión entre los habitantes. Aunque el pronóstico advertía de posibles precipitaciones, la intensidad del fenómeno tomó por sorpresa a muchos, especialmente alrededor de las 7:30 p.m., cuando el hielo comenzó a caer con fuerza.
Los granizos, algunos de considerable tamaño, impactaron vehículos tanto en circulación como estacionados, provocando abolladuras y daños en cristales. La zona centro de Monclova fue una de las más afectadas, con calles completamente cubiertas de hielo y tráfico interrumpido por momentos.