En cuatro ocasiones buscó atención para su mujer, sin recibirla, eso le costó 45 mil pesos al tener que llevarla a una clínica privada.
Monclova, Coah.- El señor Juan José Antonio denunció públicamente presunta negligencia médica y malos tratos por parte del personal de la Clínica 86 del IMSS en Monclova, tras llevar a su esposa en al menos cuatro ocasiones sin recibir atención adecuada, su caso terminó en una cirugía de urgencia en una clínica privada con un costo de 45 mil pesos que tuvo que conseguir por su cuenta.
“Llevé a mi esposa cuatro veces a la Clínica 86 y en todas me la regresaron con una pastilla, diciendo que no tenía nada, incluso en la madrugada la vio el director del IMSS y aún así no la canalizó adecuadamente”, relató el afectado en entrevista.
Su esposa, Petra Orozco Escobedo, presentaba síntomas persistentes como vómitos y dolor abdominal severo. “La comida no le pasaba y terminaba vomitando; ya no aguantaba el dolor, tuvimos que llevarla de urgencia a la Clínica San Martín donde la operaron y le extirparon dos hernias intestinales”, explicó.
Después de la cirugía, Juan José intentó acercarse nuevamente al IMSS para buscar algún tipo de reembolso o responsabilidad, pero fue ignorado. “Fui con el director de la Clínica 86 y diplomáticamente me mandó a la ching…a”, dijo con indignación.
Posteriormente fue canalizado a la Clínica 7 donde asegura haber sido maltratado por personal del área de orientación y quejas. “La señora Nadia Alanís es una persona prepotente y déspota, me trató muy mal, me hizo esperar una hora y luego me dijo que no me podía atender”, denunció.
Actualmente, la señora Petra se encuentra en recuperación en casa, aunque su movilidad está limitada. “No puede cocinar, ni lavar, ni hacer nada, yo tengo que hacer todo y a veces me la llevo con mis hijos para que me ayuden a cuidarla, le hicieron tres operaciones”, explicó el denunciante, quien además pertenece a la tercera edad y recibe una pensión “más que ridícula”.
Juan José señaló que esta no es la primera vez que enfrenta problemas con el IMSS. “En 2000 no me quisieron atender porque tenía el seguro en Tabasco, a pesar de que todo está en línea, me dijeron que fuera hasta allá, tuve que pagar 3 mil pesos y sólo porque vinieron a verificar a mi casa me resolvieron”.
Finalmente, expresó su frustración ante el sistema de salud pública: “¿Qué garantía tengo con el IMSS si ni siquiera me aceptan escucharme? No pido que me lo resuelvan todo, pero sí que me orienten, yo también fui trabajador, también entiendo, pero uno merece respeto y trato digno”, concluyó.