Algunas personas ya temen por el futuro de sus viajes con estos cambios que entrarán en vigor a partir del 27 de enero de 2026 como parte de la nueva política.
Ahora será más complicado para los pasajeros con sobrepeso conseguir un reembolso en caso de que compren un asiento adicional con la aerolínea estadounidense Southwest Airlines. Durante mucho tiempo, esta empresa tuvo una "política de larga data" que satisfacía las necesidades de asientos para aquellas personas que requerían más de uno, según se lee en un comunicado.
No obstante, las personas que viajen y "no puedan acomodarse de forma segura en un solo asiento", deberán comprar uno adicional no reembolsable. Es necesario que los interesados contacten con las aerolíneas asociadas para completar la compra. En caso de necesitar lugares contiguos, tomando en cuenta que el apoyabrazos es el límite final entre estos, los clientes deben "adquirir proactivamente" todos los que necesiten para asegurar su disponibilidad antes del viaje.
Esta aerolínea informó a través del comunicado que se reserva el derecho de determinar si un pasajero requiere de un asiento extra por motivos de seguridad. Si bien, la empresa aún permite solicitar reembolsos, esta política tiene restricciones, por ejemplo, si se solicita una vez finalizado el viaje. Aquellos que fueron adquiridos con una aerolínea asociada "no son reembolsables".
Estos cambios entrarán en vigor a partir del 27 de enero de 2026 y, en caso de que se compre un asiento adicional y se quiera solicitar un reembolso, la aerolínea informó que es necesario cumplir con los siguientes requisitos:
Igualmente, es necesario tener en cuenta otros aspectos:
Jeff Jenkins, fundador de Chubby Diaries, declaró al medio estadounidense USA Today que este parece ser "un añadido engañoso" a una política que llevaba más de 20 años vigente sin que "viera un gran impacto".
"Solo espero que los consumidores estén al tanto de este cambio y me pregunto si las personas de talla grande dejarán de volar con ellos por no saber si el vuelo está agotado. Es simplemente más ansiedad que se suma a una experiencia de ansiedad ya alta", añadió Jenkins.
Igualmente, señaló que ahora los viajeros tendrán la responsabilidad de saber si su vuelo está agotado y conocer así si podrán optar por un reembolso. USA Today informó que la política anterior aún alentaba a estos clientes a comprar dos asientos, sin embargo, existía una menor cantidad de requisitos que cumplir a la hora de conseguir una reposición de su dinero. El medio afirmó que, antes, comprar un lugar adicional era simplemente una recomendación, más no obligatorio.
Tigress Osborn, directora ejecutiva de la Asociación Nacional para el Avance de la Aceptación de la Grasa, contó durante un diálogo con The Washington Post que "no pueden permitirse este riesgo", argumentando incluso que mucha gente les ha dicho que "esto significa literalmente que ya no podrán viajar en avión".
Para otros viajeros que prefieren esta aerolínea y la convirtieron en su empresa de vuelos predeterminada por su política de tallas grandes como Corinne Fay, autora de Big Undies (un boletín de moda), temen que este cambio haga los procesos más difíciles.
"Sin duda me dieron ganas de llorar porque me va a complicar mucho la vida. Hablamos de la diferencia entre gastar 400 dólares en comparación con $800 o mucho más", lamentó Fay.