En diciembre de los corrientes el avión de Ameriquito, tamaulipeco que funge como delegado de Bienestar a tiempo parcial en Coahuila, ha volado desde su hangar en Escobedo, Nuevo León, a Tampico, el lunes, primer día del mes.

A la mañana siguiente del mencionado puerto tamaulipeco a Puebla, donde permaneció hasta el jueves 4, fecha en que regresó a Tampico, de donde se movió a Ciudad Victoria, base de operaciones por la protección que papá Gobernador dispensa, una hora más tarde.

El viernes 5, con la fresca de las 10 y media de la mañana, despegó de la capital de Tamaulipas hacia Toluca, en vísperas del acarreo masivo que se desplegó hacia el Zócalo de la Ciudad de México, con el pretexto de los siete años de transformación que no es otra cosa más que un régimen decadente de legitimidad forzando su presencia en la opinión pública.

El día de la concentración masiva la aeronave volvió a Ciudad Victoria, alrededor de las 14:20 horas, para ser guardada ‘en casa’ el resto del fin de semana. Como la turbosina y las horas de vuelo convertidas en honorarios del personal de sobrecargo no son un problema, el lunes 8, inicio de semana, fue a recogerle al mediodía, y le devolvió a Ciudad Victoria, donde aterrizó a las 4 de la tarde.

Pero hay que descansar de tan agitada vida laboral, y por eso el martes no hubo actividades. Fue hasta ayer, miércoles, ombligo de la semanita, cuando se movió -también con la fresca de las 10 y media de la mañana- hacia el renovado Aeropuerto Internacional Plan de Guadalupe, en Ramos Arizpe, posición que ocupa al momento de redactar estas líneas.

Villarreal Santiago se ha vuelto experto en mostrar en Facebook todo el carrete de fotografías de un evento, dosificado de vez en vez para que parezcan muchas acciones multiplicadas, y así crear la percepción de trabajo. Mismo que no existe, desde luego.

Eso, y compartir a título personal las publicaciones de los superiores jerárquicos de manera sistemática, en busca de atención y especialmente de indulgencia. A eso se resume su política.

Su cónyuge, por su parte, detentadora de un escaño por herencia paterna, le apuesta a la ficción de la cercanía. Acalambrar a sus congéneres que ambicionan las mismas posiciones de poder, con fotografías que hacen ver algo que no existe en la realidad.

El 27 de febrero se publicó en este mismo espacio en exclusiva que Américo Villarreal Santiago se traslada en una avioneta Cessna 340A, matrícula XB-BBK. No existe otro caso similar en las 32 delegaciones del país, en parte por una razón: allá los delegados son originarios del estado donde han sido encomendados, o por lo menos radicados en él.

Su semana laboral en la capital de Coahuila, sede de las oficinas de la Delegación -cuando está en ellas- comprende -como mucho- tres días, como se puede verificar en la bitácora de vuelos mensuales (hasta mediados de septiembre, por ejemplo, había registrado un total de 55 viajes en 2025). La física lo dice: un cuerpo no puede ocupar dos lugares al mismo tiempo. No hay delegado de tiempo completo.

El avión en que se mueve fue matriculado el 24 de julio de 2024, es decir, semanas después de la elección federal, aunque no fue hasta el 6 de octubre del mismo año cuando se completó el trámite con el pedimento de importación.

Amarrado ya en la Delegación de Bienestar Coahuila, a escasos días de haber tomado posesión del cargo.

Anteriormente, antes de ser expuesto aquí el caso, guardaban el juguetito en el “Hangar de Gobierno” del Gobierno del Estado de Tamaulipas, en el Aeropuerto Internacional de Ciudad Victoria “General Pedro José Méndez”.

Ahora bien, un segundo avión aguarda mejores tiempos para ser usado. Que se enfríen las cosas.

Se trata de un Cessna 340A, de uso particular, bajo la misma razón social que registró el otro: Servimecánica Aérea, S.A. de C.V., y en el mismo lugar donde lo esconden: el Aeropuerto Internacional del Norte.

Llegó de Arizona a Ozona, Texas, y de ahí a Laredo a finales de 2024; el 24 de febrero del presente año, en la coyuntura de haberse descubierto su avión privado, fue registrado como comodín ante la Agencia Federal de Aviación Civil.

La empresa que figura en documentos como propietaria, no obstante, fue constituida en Monterrey y tiene por objeto social el mantenimiento, reparación y compraventa de aeronaves. Pertenece, en el papel, a Juan Manuel Medina Andrade, un técnico en aviación originario de Ciudad Victoria, de 69 años de edad (compañero de generación de Américo Villarreal Anaya, Gobernador de Tamaulipas).

Se trata de un taller, no un concesionario de aviones en rentas.

Cortita y al pie

En primera fila del informe de Manolo Jiménez en el Congreso del Estado, el 24 de noviembre, Cecilia y Américo fueron exhibidos como los únicos dos neo morenistas afines al régimen estatal entre una multitud de verdaderas autoridades y representantes populares. Son, desde entonces, la pareja pichón. Los espositos del Bienestar. Nepobabys sin idea de lo que andan haciendo en el espacio público, más allá de ocupar posiciones por nepotismo y estorbar a verdaderos opositores y adversarios. Significan, para efectos prácticos, los rivales más fáciles de derrotar en las urnas en próximas elecciones y, en general, en cualquier mesa de negociación y debate. Patiños. Comparsas. Ya están medidos y pesados, y el plan en marcha.

¿Lo saben morenos fundamentalistas y petistas recalcitrantes que andan despistados apoyando cualquier cosa que les hagan pasar bajo la marca ‘4T’, verdad?

La última y nos vamos

Por lo demás la Presidenta, entre otras cosas, en el templete y ante Américo y Cecilia como espectadores el día del referido acarreo, dijo: “no puede haber justificación moral, ética ni política para que quienes servimos al pueblo vivamos rodeados de lujos o privilegios”.

Y a todo esto, después de tantas rutas aéreas, ¿a qué hora trabaja el muñeco?