Donald Trump calificó como “gran progreso” el primer día de negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China
A very good meeting today with China, in Switzerland. Many things discussed, much agreed to. A total reset negotiated in a friendly, but constructive, manner. We want to see, for the good of both China and the U.S., an opening up of China to American business. GREAT PROGRESS…
— Donald J. Trump Posts From His Truth Social (@TrumpDailyPosts) May 10, 2025
La ronda de pláticas es el primer encuentro formal de alto nivel desde la reactivación del conflicto. Por parte de EE.U U. participan el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y el representante comercial, Jamieson Greer. China está representada por el vice primer ministro, He Lifeng, quien llegó con cifras alentadoras: sus exportaciones crecieron 8.1% en abril, aunque las ventas a EE. UU. cayeron casi un 18%.
El tema clave de las negociaciones son los aranceles, que actualmente alcanzan el 145% para productos chinos y el 125% para exportaciones estadounidenses. Estas medidas provocaron un freno en el comercio bilateral y generaron turbulencias en los mercados globales.
Aunque Trump sugirió bajar los aranceles al 80%, aclaró que la reducción no será unilateral. La Casa Blanca advirtió que cualquier recorte está condicionado a que China haga concesiones concretas, lo que mantiene la presión sobre Pekín.
Según expertos, como Bonnie Glaser, una posibilidad real es que ambas partes acuerden una suspensión provisional de los aranceles durante la negociación. Otros, como Lizzi Lee, creen que habrá un “gesto simbólico”, pero sin cambios estructurales inmediatos. En contraste, el economista Xu Bin advirtió que incluso una baja parcial “será insuficiente para reactivar el comercio normal”.
Las reuniones se celebran en un chalet diplomático suizo y han sido calificadas como “constructivas” por la directora de la OMC, Ngozi Okonjo-Iweala, quien alertó sobre el riesgo de un desacoplamiento económico entre las dos principales economías del mundo.
Mientras tanto, la expectativa global es alta. Trump busca un acuerdo favorable sin ceder del todo, y China mantiene una postura firme, pero abierta al diálogo. Ambos países coinciden en que es momento de buscar una salida negociada al conflicto que ha impactado no solo su relación, sino también la estabilidad del comercio mundial.