La polémica estalló el pasado sábado en el escenario West Holts, donde las actuaciones de la banda irlandesa de hip-hop Kneecap y el dúo punk Bob Vylan generaron una fuerte controversia.
Londres, Inglaterra. La policía del condado de Avon y Somerset, en el suroeste de Inglaterra, ha iniciado una evaluación para determinar si abre una investigación penal tras los comentarios considerados antiisraelíes emitidos por artistas durante el icónico Festival de Glastonbury.
La polémica estalló el pasado sábado en el escenario West Holts, donde las actuaciones de la banda irlandesa de hip-hop Kneecap y el dúo punk Bob Vylan generaron una fuerte controversia.
El punto de mayor tensión se alcanzó cuando uno de los miembros de Bob Vylan coreó en escena: “Muerte, muerte a las FDI”, en clara referencia a las Fuerzas de Defensa de Israel. A través de un comunicado publicado en la red social X, la policía local confirmó que revisará grabaciones en video para establecer si estas expresiones constituyen un delito que justifique una investigación formal.
Los organizadores del multitudinario festival expresaron su “consternación” por los comentarios y enfatizaron su rechazo categórico a cualquier manifestación de antisemitismo o incitación a la violencia.
”Sus cánticos sobrepasaron con mucho la línea. Estamos recordando urgentemente a todos los implicados en la producción del festival que en Glastonbury no hay lugar para el antisemitismo, el discurso de odio ni la incitación”, afirmó la organización en un comunicado oficial. Hasta el momento, ni Bob Vylan ni Kneecap han emitido declaraciones.
La Embajada de Israel en el Reino Unido calificó de “profundamente perturbadora” la retórica escuchada en el festival. Desde el ámbito político, la Secretaria de Estado de Cultura, Lisa Nandy, solicitó una explicación a la BBC por la transmisión del espectáculo de Bob Vylan en la televisión pública.
Por su parte, el Secretario de Sanidad, Wes Streeting, calificó los cánticos como “espantosos”. No obstante, también aprovechó la ocasión para señalar su preocupación por los actos violentos de colonos israelíes en Cisjordania, remarcando que
”Ojalá se tomara con la misma seriedad la violencia de los propios ciudadanos de Israel contra los palestinos”, comentó en entrevista con Sky News.
La controversia no es ajena a Kneecap. Su líder, Liam Óg Ó hAnnaidh, enfrenta cargos en Irlanda del Norte por presuntamente exhibir una bandera en apoyo al grupo militante Hezbolá durante un concierto el pasado noviembre, acusaciones que ha negado.
Durante su actuación en Glastonbury, Ó hAnnaidh acusó públicamente a Israel de cometer crímenes de guerra, afirmando que “no se puede ocultar” lo que ocurre. Cabe recordar que, a principios de mes, el primer ministro Keir Starmer ya había calificado la participación de Kneecap en el festival como “inapropiada”.
