Papa Francisco se reunió con Vicepresidente de EU y después bendijo a fieles desde balcón de Basílica de San Pedro y les deseó feliz Pascua
Ciudad del Vaticano.- El Papa Francisco, se reunió brevemente con el Vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, y después apareció en el balcón de la Basílica de San Pedro del Vaticano, donde deseó una “feliz Pascua” a los miles de fieles congregados allí por el Domingo de Resurrección.
Todavía convaleciente por neumonía y un mes después de que fuera dado de alta tras una larga hospitalización, la presencia del Pontífice era muy incierta y El Vaticano no la había confirmado.
Un poco antes de acudir a la Plaza de San Pedro, el Papa recibió a Vance, en un “encuentro privado” de “unos minutos”, dos meses después de que Francisco criticara la política migratoria del Gobierno de Donald Trump.
La reunión fue en la residencia de Santa Marta, donde vive el Papa en El Vaticano. El funcionario estadounidense acudió a Roma para pasar la Pascua con su familia. El Vaticano dijo que el encuentro fue breve y pretendía permitir un intercambio de saludos por la celebración católica de este día.
“Es un placer verle en mejor estado de salud”, declaró JD Vance al Papa argentino, según un video publicado por El Vaticano.
“Gracias por recibirme. Rezo por usted cada día. Que dios le bendiga”, añadió antes de estrecharle la mano.
El Pontífice hizo regalos al Vicepresidente estadounidense, entre ellos unos rosarios, una corbata estampada con el escudo del Vaticano y huevos de chocolate para sus tres hijos.
JD Vance, convertido al catolicismo a los 35 años, fue recibido ayer en El Vaticano por el cardenal italiano Pietro Parolin, Secretario de Estado y número dos de la Santa Sede.
En este encuentro “cordial” se abordó “la situación internacional, en particular en los países marcados por la guerra, las tensiones políticas y situaciones humanitarias difíciles, con especial atención a los migrantes, refugiados y prisioneros”, indicó el Vaticano en un comunicado.
En febrero, el jesuita provocó indignación en la Casa Blanca al condenar, en una carta a los obispos estadounidenses, las expulsiones masivas de migrantes promovidas por el Presidente Trump, que calificó de “importante crisis”.
“Lo que se construye a base de fuerza, y no a partir de la verdad sobre la igual dignidad de todo ser humano, mal comienza y mal terminará”, advirtió en su misiva.
El Vicepresidente estadounidense, un ferviente católico, quiere hacer de su país un baluarte de los valores conservadores limitando drásticamente la inmigración.
Francisco no celebró la Misa de Pascua en la Plaza, que delegó en el cardenal Angelo Comastri, el arcipreste retirado de la Basílica de San Pedro. Pero después de que terminara la eucaristía, apareció en el balcón de la logia durante más de 20 minutos e impartió la bendición apostólica en latín, conocida como “Urbi et Orbi” (a la ciudad de Roma y al mundo).