Una profesora que abusó sexualmente de uno de sus alumnos, que tenía entonces solo 11 años de edad, fue condenada a cubrir nueve años de prisión en la ciudad de Leningrado, Rusia.

Allí, Anna Plaksyuk, quien era la encargada de dar clases a un grupo de estudiantes en la localidad de Toksovo, acosó sistemáticamente al pequeño estudiante, quien guardó silencio ante las amenazas proferidas por su profesora.

De acuerdo con las autoridades, Plaksyuk hacía que su víctima se quedara después de clases para besarla en los labios y, posteriormente, le realizaba tocamientos lascivos y obligaba al niño que le correspondiera.