Mientras este 7 de mayo inicia el cónclave en el Vaticano para elegir al sucesor del papa Francisco, una oleada de entusiasmo recorre el mundo, no solo por el futuro de la Iglesia Católica, sino también por las apuestas que ha generado la elección del nuevo pontífice.

Aunque el proceso es profundamente solemne y se desarrolla en el hermetismo de la Capilla Sixtina, donde los cardenales emitirán sus votos en completo aislamiento, el interés popular ha llevado el tema más allá de lo espiritual. Plataformas de apuestas en línea, juegos inspirados en el fantasy football y desafíos informales entre amigos y familiares están en auge, según reportan expertos del sector. 

Sam Eaton, gerente en Reino Unido de Oddschecker —una plataforma que compara probabilidades de apuestas en deportes y eventos globales—, aseguró que el interés por predecir al nuevo papa ha superado incluso a torneos de alto perfil como la Europa League y el campeonato de pilotos de Fórmula Uno. 

“Cientos de miles de personas de aproximadamente 140 países han ingresado a Oddschecker para revisar las probabilidades de cada cardenal”, afirmó Eaton, quien destacó un particular entusiasmo en el Reino Unido, Irlanda y Estados Unidos. 

En Roma, por ejemplo, algunas personas han organizado apuestas amistosas de unos 20 dólares, con recompensas simbólicas como pagar una cena o invitar una noche de pizza. Aunque no hay dinero de por medio en todos los casos, el fenómeno revela el interés colectivo en uno de los eventos más importantes para los 1,400 millones de católicos en el mundo.