El equipo de videovigilancia captó parcialmente el enfrentamiento, toda vez que las puertas se cerraron en reiteradas ocasiones y los hombres se salieron del ángulo de la cámara. No obstante, se logra apreciar que la mujer se mantiene a salvo dentro del ascensor.
Es importante mencionar que el compañero de trabajo al frente de la puerta del ascensor portaba una porra, detrás de su espalda, objeto el cual utilizó segundos después de evadir el hacha de la expareja furiosa. Por su lado, el segundo compañero sufre una herida en el rostro en pleno forcejeo para arrebatarle el hacha.
En el país chino el Partido Comunista ha sido señalado en reiteradas ocasiones por agravar la violencia contra la mujer y omitir las denuncias por parte de víctimas y colectivos, quienes exigen una respuesta a este tipo de agresiones. Sin embargo, las autoridades chinas han cometido censura en redes sociales y han silenciado los casos de violencia contra la mujer, lo que ha complicado la lucha para que exista mayor igualdad de género dentro del gigante asiático.