La mujer estuvo presente durante el encuentro con el nuncio apostólico Joseph Spiteri, como parte del colectivo de Madres Buscadoras, en la parroquia del Verbo Encarnado, en Frontera.
“No voy a descansar hasta hallarlo, vivo o muerto”, dijo colmada en llanto Ana Leticia Bautista de la Rosa, madre de familia de la colonia Occidental, en Frontera, quien sufrió la desaparición de su hijo, Daniel Iracheta Bautista, en 2015, cuando el jovencito tenía apenas 17 años.
La mujer estuvo presente durante el encuentro con el nuncio apostólico Joseph Spiteri, como parte del colectivo de Madres Buscadoras, en la parroquia del Verbo Encarnado, en Frontera. Afirmó que sabe dónde podrían estar los restos de su vástago, de quien presume habría sido ultimado por criminales.
“Él era un buen estudiante de secundaria, mi hijo; y pues a él se lo llevaron por un sobrino que andaba mal… lo confundieron y se lo llevaron”, expresó Ana Leticia, ahogada en lágrimas.
A pregunta expresa, la mujer sostuvo que ella y Daniel son oriundos de la propia colonia Occidental, y que fue en ese mismo sector donde el jovencito desapareció.