Justin Bieber sorprendió a sus fans con el lanzamiento inesperado de SWAG II, su octavo álbum de estudio con 23 nuevas canciones.
Justin Bieber volvió a sacudir al mundo de la música. A menos de dos meses del lanzamiento de SWAG (11 de julio), el canadiense estrenó por sorpresa SWAG II, su octavo álbum de estudio, que vio la luz la madrugada del 5 de septiembre sin previo aviso.
El anuncio de Justin Bieber fue tan inesperado como espectacular con una publicación en Instagram acompañada de vallas publicitarias en tonos rosa pastel en ciudades como Nueva York, París y Londres, además de proyecciones globales de la ya reconocible geometría visual diseñada por Skylrk.
Con 23 canciones, SWAG II mantiene la estética minimalista pero avanza hacia un sonido más pop, menos R&B, sin perder la carga emocional y de vulnerabilidad que marcó la primera entrega.
Entre los temas más comentados se encuentran Love Song, Mother in You y Don’t Wanna, composiciones donde Justin Bieber aborda su nueva faceta como padre de Jack Blues y su relación con Hailey Bieber.
El álbum también incluye colaboraciones de peso con Tems, Lil B, Bakar, Hurricane Chris y Eddie Benjamin, confirmando la apuesta de Bieber por una diversidad de géneros y voces que enriquecen la propuesta.
Este lanzamiento llega en un periodo trascendental para el artista. Se trata de su primer proyecto musical tras convertirse en padre en 2024 y del inicio de un nuevo contrato con Def Jam Records, que contempla cuatro álbumes.
En paralelo, Justin y Hailey Bieber han atravesado turbulencias financieras, especialmente tras la cancelación de una gira. Sin embargo, la millonaria venta de la marca de belleza Rhode por mil millones de dólares les permitió recuperar estabilidad.
SWAG II repite el equipo de producción de lujo con nombres como Dijon, Mk.gee, Carter Lang y Mike Will Made It. El álbum ya está disponible en Spotify, Apple Music y demás plataformas, después de un breve retraso técnico en su lanzamiento inicial.
Con este segundo capítulo de la era SWAG, Justin Bieber no solo reafirma su vigencia en la industria, sino que también proyecta una nueva visión artística al fusionar la introspección personal con estrategias de promoción arriesgadas y disruptivas.
