Lanzado como parte de su nuevo álbum "Nadie se va como llegó", la cantante mexicana mezcla de forma exitosa distintos sonidos que terminan por musicalizar el desamor
Ángela Aguilar, una de las voces más distintivas del regional mexicano actual, da un giro inesperado pero poderoso con su nuevo sencillo "Corazón de piedra", una canción con la que incursiona en los cada vez más influyentes sonidos tumbados. Con este tema, la joven heredera de la dinastía Aguilar se aleja momentáneamente del mariachi tradicional que la lanzó al estrellato para explorar nuevos caminos sonoros, sin perder la intensidad emocional que siempre caracteriza su interpretación.
"Corazón de piedra" no es solamente un experimento musical, sino un retrato crudo sobre un desamor que aún duele, de una herida abierta que encuentra en la música su única forma de expresión. Con una letra que destila honestidad y nostalgia, Ángela se une a la nueva ola de artistas que están reescribiendo las reglas del regional mexicano, al mismo tiempo que se mantiene fiel a la esencia emocional que ha sido el alma de este género por décadas.
Desde el primer verso, Ángela deja claro que esta no es una canción de reconciliación ni una súplica para volver, sino más bien es una exposición de la fragilidad que deja el abandono, del peso de lo no dicho y de lo que no se hizo a tiempo. La protagonista de esta historia no solo sufre, sino que se encuentra atrapada en un recuerdo que todavía duele y mucho.
Aunque "Corazón de piedra" comienza con los sonidos clásicos de los tumbados, pronto incorpora de forma muy marcada el mariachi que la ha acompañado desde el inicio de su carrera, así como arreglos de orquesta que terminan por dramatizar aún más el dolor plasmado en la letra.
De la misma forma, su timbre vocal sigue siendo claro y tradicional, con esa fuerza heredada de la dinastía Aguilar, pero al incorporar sonidos que se han popularizado por artistas como Peso Pluma o Natanael Cano, todo parece indicar que la cantante busca crear un puente entre la música regional mexicana más clásica y las nuevas formas de expresión urbana.
Este sencillo podría marcar un punto de inflexión en la carrera de Aguilar, pues no se trata de un abandono de sus raíces rancheras, sino de una expansión de su lenguaje artístico, por lo que "Corazón de piedra" la muestra como una artista capaz de dialogar con las nuevas corrientes sin perder su identidad.
Y es que en tiempos donde los géneros se mezclan y las emociones se cantan sin filtros, Ángela Aguilar demuestra que la tradición también puede ser contemporánea, y que el dolor, cuando se canta con verdad, no necesita más adornos.
No hay palabras de amor
Que a este corazón convenza
Ya no hay ganas de amar, si no te puedo olvidar
Que pases por mi mente, cada vez es más frecuente
No lo puedo evitar, cierro los ojos y ahí estás
Pero mira, ya ves que no es mentira
Hacer las cosas bien es lo único que pedía
Tus labios decían te amo, pero te faltó demostrar
Que tú te morías como yo por ti
Que no imaginabas futuro sin mí
Ojalá existiera regresar el tiempo y no vivir lo que duele el recuerdo
Corazón de piedra para no sentir
Porque el pasado ahora me hace sufrir
Ojalá pudiera regresar el tiempo, para escuchar ese último te quiero
Pero mira, ya ves que no es mentira
Hacer las cosas bien era lo único que pedía
Tus labios decían te amo, pero te faltó demostrar
Que tú te morías como yo por ti
Que no imaginabas futuro sin mí
Ojalá existiera regresar el tiempo y no vivir lo que duele el recuerdo
Corazón de piedra para no sentir
Porque el pasado ahora me hace sufrir
Ojalá pudiera regresar el tiempo, para escuchar ese último te quiero...