Saltillo, Coah.– El padre Vicente Eliamar Vega Carrales recordó que morir con un solo pecado mortal sin confesar se paga con la condenación eterna y un pecado mortal es faltar a misa en domingo o en fiesta de guardar.

Añadió que no hay peor tragedia para el hombre, que el pecado, sobre todo el pecado mortal porque engendra muerte eterna y, pese a ello, las personas sólo dicen que perdieron la gracia y la comunión.

“¿Cuál es esa tragedia? Que si una persona muriese, en su alma con un solo pecado mortal, uno, sin arrepentirse, está en un tremendo riesgo de condenarse por toda la eternidad”.

La peor tragedia para el hombre no es la enfermedad, los problemas económicos. ni siquiera la terrible violencia e inseguridad que estamos viviendo, ni la muerte física, aseguró.

“La peor tragedia para el hombre es la muerte eterna y estamos en una situación muy delicada porque vamos ninguneando el pecado. Como decir ‘¡ah, no pasa nada!’. Pero sí pasa. Un ejemplo pongo, un pecado mortal a veces olvidado: faltar a misa en domingo o en fiesta de guardar”.

Sin embargo, hay un principio moral que dice que “el imposible a nadie obliga”, es decir, que se puede faltar a misa por enfermedad, por vejez o cualquier causa realmente grave que impidan asistir al oficio.

“Es verdad, en pecado mortal no debo de comulgar, pero hay otra verdad más grande: Cristo ha pagado tu pecado, ya no debes nada, acércate a su perdón, déjate abrazar y reconciliar e inicia la comunión con El”.

Además, el pecado se debe reconocer con vergüenza, de lo contrario, sólo se está cumpliendo un protocolo, un formulario, que no transforma a la persona.