Como una joven alegre, sin maldad, llena de bondad y de sueños, es como recordarán sus familiares a Jimena Alejandra Medina.
Sabinas, Coah.- Como una joven alegre, sin maldad, llena de bondad y de sueños, es como recordarán sus familiares a Jimena Alejandra Medina Márquez, joven sabinense de 17 años de edad que, desafortunadamente, se volvió una víctima de feminicidio, siendo encontrada sin vida el jueves al mediodía tras cuatro días de intensa búsqueda.
No obstante, gracias a la rápida intervención de los detectives de la Agencia de Investigación Criminal de la Región Carbonífera, hay dos hombres detenidos por el delito de feminicidio, quienes son señalados como los presuntos responsables de ultimar a Jimena.
Sus padres, Jorge Medina y Dulce Belén Márquez, así como sus cuatro hermanos y familiares, claman justicia al recibir tan dura noticia. "Nos quitaron una parte de nuestra alma, se creyeron con el derecho de arrebatarle la vida a una princesa. La buscamos y la encontramos, no como queríamos, pero hoy la entregamos a Cristo, llevándose todo el amor que le tendremos por siempre, mi gemelita", son las palabras de Reyna Márquez, prima hermana de Jimena, quien la describió como una mujer que tenía un corazón puro.
"Con su iluminada sonrisa, su alegría y su disponibilidad para enseñar es cómo vamos a recordar a nuestra niña. Era la más hermosa y no hablo solo por fuera; no tenía nada de maldad, no sabía de rencor, de desconfianza, siempre ayudaba a todos", comentó.
Recordó que el día que "Mena", como le decían de cariño, llegó a sus vidas, hizo feliz a sus padres y su familia, pues después de cuatro varones, la familia Medina Márquez recibía tan hermoso regalo: una princesa.
"Era la más chica de 5 hermanos y la única niña que tanto esperábamos. Después de 4 hermanos hombres, fue la princesa que esperábamos; su nacimiento nos dio una alegría, tan hermoso regalo", dijo.
Reyna Márquez señaló que Jimena siempre fue una niña alegre, que le echaba ganas a todo, siendo una excelente estudiante que, llena de humildad, ayudaba y enseñaba a quien tenía problemas con clases o materias.
"Uno de sus sueños era ser maestra de preescolar o primaria. Siempre fue muy estudiosa, la mejor de su clase; ayudaba a los niños del CEAT en UANE para darles clases particulares, trabajaba, le echaba muchas ganas", agregó.
"Hoy perdimos a una parte de nosotros, un bello ángel que nos deja grandes recuerdos. No merecía esto, nadie lo merece, ni una mujer ni un ser humano, pero nos tocó vivirlo en carne propia. Como familia estamos tranquilos, solo queremos su descanso eterno bajo el manto del Señor, que las autoridades hagan lo correspondiente; nosotros solo queremos respeto a nuestro dolor", concluyó.