Las personas cuidadoras pueden tener buena imagen social, pero ocultan sus verdaderas intenciones.
Saltillo, Coah.- Especialistas en adultos mayores advirtieron que ahora el padre y la madre delegan la responsabilidad de la crianza de los hijos a los abuelos, incluso abusan de su tiempo y espacio, pues los fines de semana los dejan bajo su resguardo para irse de antro, poniendo en riesgo incluso de muerte a niños y ancianos.
Además, en ocasiones no les importa que la abuela y el abuelo tengan enfermedades y que se les agraven por cuidar de los nietos, o se les detonen otras.
“La crianza es una responsabilidad de los padres, donde antes no se tenía ni que defender. El papá y la mamá te educaban, te criaban, te daban los valores, te enseñaban la fe, la que tuvieras, pero eran los responsables de inculcarte el amor a los abuelos, el respeto a los mayores, el respeto a la autoridad”, señaló Chantal Palos, licenciada en Ciencias de la Familia”.
Otro problema es que la hija o el hijo consideran que sus padres, al pensionarse o jubilarse, no tienen actividades que hacer y los dejan bajo su cuidado, un promedio de 7 a 8 horas al día, como una jornada laboral, informó Reyna Arriaga Bueno, doctora en Ciencias Sociales con Atención a Grupos Vulnerables.
“Esa perspectiva de ver a los papás, de que tienen todo el tiempo del mundo, de que ya no están haciendo nada, es una visión sobre el envejecimiento muy limitada, porque no ves a la persona mayor como un individuo que tiene derechos, que tiene libertades, que es autónomo todavía, que puede tomar decisiones y que él puede tomar la decisión de decir ‘en este horario no te los puedo cuidar, porque yo me voy a ir a jugar dominó con mis amigos’”.
Los hijos y las hijas no reparan en que sus padres pueden estar cansados y en que las enfermedades que padecen pueden acentuarse, o bien, desarrollar otros padecimientos por el esfuerzo de cuidar a los nietos.
“Ansiedad, insomnio, sobrecarga de trabajo y cansancio crónico, si a eso le sumamos esta serie de enfermedades crónicas que son comunes en México, como la diabetes, la hipertensión, estamos hablando entonces de que se está sobrecargando a las personas mayores, en muchas ocasiones en el cuidado de los nietos”.
César de León Alvarado, sicoterapeuta, recomendó a la madre y al padre estar atentos a la manera de pensar, hablar y actuar de la persona cuidadora, así sean los abuelos, porque puede haber indicios que el nieto está en riesgo.
Incluso, advirtió, las personas cuidadoras pueden tener buena imagen social, pero ocultan sus verdaderas intenciones: manipulan a los menores para que no denuncien el maltrato o abuso que sufren, de ahí la importancia de la comunicación con los hijos.
“Que tengan la confianza de decirnos qué viven, qué ven, porque luego en las tácticas perversas de adultos que abusan emocional, física o sexualmente de menores, siempre hay una amenaza de que si dicen algo o los agreden a ellos, o los van a matar o a su familiar, o los hacen sentir culpables o responsables de lo que les pasó, y entonces se vuelve una trampa emocional”, expresó.